¿En qué consiste la energía hidráulica y cómo se genera?
Durante siglos, el agua ha servido como recurso para generar energía hidráulica. Los romanos y los griegos, por ejemplo, ya la utilizaban para labores como el molido de grano. Sin embargo, tuvo que llegar el descubrimiento de la lámpara eléctrica por Thomas Edison en 1882 para que comenzara a desarrollarse la hidroeléctrica. Ahora bien, ¿se encuentra realmente entre las renovables? ¿Es limpia o contamina?Te lo contamos.
¿Qué es la energía hidráulica?
Es la que se crea a partir del movimiento del agua, lo que produce energía cinética. Para ello, este proceso requiere gran fuerza y velocidad de corrientes o saltos de las cascadas o ríos. Básicamente, se basa en el choque contra una turbina que la hace girar y, mediante la conexión a un transformador, se produce la electricidad.
Este sistema venimos utilizándolo desde hace muchos años y sus ventajas han hecho de él un recurso importante de las políticas energéticas en muchos países. En España, pese a contar con numerosas horas de sol y periodos de sequía, ha supuesto un pilar energético históricamente. De hecho, en 1940, el 92 % de la electricidad era de origen hidráulico.
Desde entonces, las cosas han cambiado en extremo. El mix energético se ha diversificado y, en la actualidad, solo representa un 20 % del total, aproximadamente. La fotovoltaica y, sobre todo, la eólica, soportan el mayor peso como fuentes renovables.
¿Es renovable?
Sí. De hecho, venimos empleándola antes que otras formas más actuales, como el autoconsumo solar, por ejemplo. Además, es limpia y rentable, ya que las hidroeléctricas pueden proporcionarla a la red de forma inmediata. En esta misma línea, entre sus beneficios está que sirve para el control de inundaciones, apoyar al riego y ofrecer suministro.
Asimismo, presenta ventajas muy a considerar tales como:
- Libera cantidades muy pequeñas de gases de efecto invernadero que son inferiores a las de las eléctricas de gas, carbón o petróleo. Esto contribuye a combatir el cambio climático y evita la emisión correspondiente a quemar 4,4 millones de barriles de petróleo por día en el mundo.
- Contribuye a que se embalse agua potable. Las hidroeléctricas recogen el agua la de lluvia y, de esta manera, además de facilitar el consumo y el riego, protege las capas freáticas y ayuda a luchar contra los posibles efectos de inundaciones o sequías.
¿Es una energía limpia?
Este es, sin duda, uno de los mayores puntos positivos que vemos, pues las plantas no contaminan ni emiten sustancias tóxicas. Por lo general, tienen una vida útil muy larga, superior a 50 años, lo que implica que benefician a varias generaciones.
Es más, cuando estas instalaciones quedan obsoletas, actualizarlas resulta una tarea bastante sencilla gracias a la aplicación de tecnología. Mediante la incorporación de ciertos ajustes, alargar la actividad de estos sistemas con unos bajos costes de funcionamiento y mantenimiento se convierte en una realidad.
Con relación a esto, destacamos la importancia de este líquido como recurso que posibilita la vida. Está contemplado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de 2030 (ODS), que han sido establecidos por las Naciones Unidas para acabar con la pobreza, la guerra, la injusticia social y el cambio climático. En concreto, forma parte de los siguientes objetivos:
- Número 6: Agua limpia y saneamiento.
- Número 7: Energía asequible y no contaminante.
- Número 9: Industria, innovación e infraestructura.
- Número 13: Acción por el clima.

¿Cómo se crea la energía hidráulica?
El proceso se realiza en una central hidráulica, que se ubica en un lugar donde haya una fuente de agua o esté cercana. Estas instalaciones se construyen en zonas con una gran pendiente o cambio de elevación. Así, al caer con fuerza, y cuanto mayor sea el flujo de esta, más electricidad se obtiene. El líquido entra por una tubería y se dirige hacia una turbina, a la que hace girar con la fuerza y la velocidad de su flujo.
Ejemplos de ello son las mayores centrales hidroeléctricas de España, entre las que se encuentran las siguientes:
- Aldeadávila. Castilla y León.
- José María de Oriol. Extremadura.
- Villarino. Castilla y León.
- Cortes-La Muela. Valencia.
¿Qué tipos de hidroeléctricas hay?
Se dividen, principalmente, en tres macrocategorías, según el sistema que usan:
- De agua fluyente.
- De embalse.
- De bombeo o reversibles.
¿Qué comunidades autónomas lideran este sector?
En España, casi todas las comunidades autónomas cuentan con plantas de generación, con la única excepción de Baleares. Te mostramos un pequeño listado de las que más producen, por este orden:
- Castilla y León.
- Galicia.
- Aragón.
- Cataluña.
- Extremadura.
En términos generales, se necesita que la región registre una considerable cantidad de lluvia anual, además de contar con montañas y acantilados en su orografía. De este modo, se favorece la construcción de presas para que caiga con fuerza, proveniente de los ríos, los deshielos y las crecidas en épocas de lluvia.
¿Qué países son potencias?
España ocupa el quinto lugar en Europa por volumen de producción, por detrás de Noruega, Suecia, Francia e Italia. A nivel mundial, estos son los países con mayor potencia hidráulica:
- China.
- Brasil.
- Canadá.
- Estados Unidos.
- Rusia.
- India.
- Noruega.
- Turquía.
- Japón.
- Francia.
¿Qué le depara el futuro?
Continuará siendo, sin duda, una energía renovable fundamental para combatir el cambio climático. De hecho, lo ideal es que sea capaz de generar en torno a un 60 % más respecto las cifras del presente con vistas a 2050, según la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA). Dicho organismo argumenta que, si incrementamos la capacidad hidroeléctrica a estos números, nos ayudará a lograr el objetivo de no sobrepasar los 1,5 grados de aumento de temperatura global en dicha fecha.
Por este motivo, la inversión en este sector proporcionará bastante rentabilidad de cara al futuro, además de tener la capacidad de impulsar iniciativas que aporten valor tanto al medioambiente como a la economía. En este marco, creemos que es recomendable buscar el asesoramiento y ayuda de un proveedor europeo de financiación participativa. De esta forma, puedes colaborar con proyectos que buscan un cambio en el modelo energético.
Con todo, la hidráulica ha sido y seguirá siendo un pilar básico en el mix de energía sostenible, ya que es limpia y rentable, entre otras muchas ventajas. Por lo tanto, si invertimos en este ámbito, estaremos haciendo apuesta de futuro. ¿Te animas a implicarte?
Compártelo donde quieras
No te pierdas nada
No te pierdas nada
¿Te gustó esto? Mira estos otros:
Una acción,
tres beneficios
Invertir en sostenibilidad tiene muchos más beneficios que los económicos. También impactamos positivamente en el medioambiente, la sociedad y el territorio.
Haciendo fácil
lo complejo
Evaluamos previamente todos los proyectos para garantizar su viabilidad, e innovamos cada día para que sea fácil y entendible para todo el mundo.
Empieza a invertir en proyectos sostenibles que impactan

